La fe en acción, el ejemplo de Josafat

“y dijo [Josafat]: Jehová Dios de nuestros padres, ¿no eres tú Dios en los cielos, y tienes dominio sobre todos los reinos de las naciones? ¿No está en tu mano tal fuerza y poder, que no hay quien te resista?” 1 Crónicas 20:6

El rey Josafat acababa de enterarse de que “una gran multitud del otro lado del mar, y de Siria” venía contra su reino, y ya estaban más cerca (verso 2). Si ese ejército los alcanzaba matarían a todos los hombres, tomarían a sus mujeres y asesinarían o esclavizarían a sus hijos. Este enemigo los superaba ampliamente así que nadie podía concebir forma alguna de librarse, hasta que Josafat hizo lo más prudente: Clamar a Dios: “en nosotros no hay fuerza contra tan grande multitud que viene contra nosotros; no sabemos qué hacer, y a ti volvemos nuestros ojos.” (Verso 12). Este sabio rey también “humilló su rostro para consultar a Jehová, e hizo pregonar ayuno a todo Judá” (Verso 3).

Josafat recurrió a Dios porque su problema no tenía solución posible ni racional, solo un milagro podría salvarlos. Pero es en estas circunstancias donde Dios se glorifica. Él se especializa en actuar cuando nuestras opciones se acaban. Yo creo que el Padre se deleitó cuando Josafat, con un corazón sincero, se enfocó en Él y no en su enemigo: “¿no eres tú Dios en los cielos, y tienes dominio sobre todo? ¿Quién puede resistirte?” Josafat confesaba lo que no podía ver, esperando lo imposible; así Josafat ejercía fe. Su mente no podía concebir alguna forma de escape; su ejército era muy inferior al de los sanguinarios moabitas, pero el rey se aferró a la Palabra. ¿Es acaso tu circunstancia más desesperante que la de Josafat? ¿Puedes aferrarte tú a Su Palabra en medio de tu situación actual? Dile: “Señor, no entiendo esto, no sé por qué está sucediendo ni como resolverlo. Yo no puedo cambiar este pronóstico médico, no pagar mis deudas; no sé como recuperar mi matrimonio ni entiendo cómo mi dulce hijo se volvió tan rebelde, pero lo que si sé es que Tú eres Rey de los Cielos y tienes dominio sobre toda circunstancia, que eres el Dios que sana a los enfermos, que libra a los cautivos, que prospera a los que Le aman.” Entonces estarás ejerciendo fe:

“Y cuando comenzaron a entonar cantos de alabanza, Jehová puso contra los hijos de Amón, de Moab y del monte de Seir, las emboscadas de ellos mismos que venían contra Judá, y se mataron los unos a los otros.” 2 Crónicas 20:22