Cambia tu lente

“Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios.” Colosenses 3:1

Hace algunos años, mientras vivíamos en Yakarta, subimos a la azotea de un edificio para disfrutar de un maravilloso espectáculo: un eclipse solar en pleno mediodía. Cuando llegamos ya el fenómeno llevaba tiempo y la luz de la ciudad se hizo un poco tenue, como cuando comienza a atardecer. Mi curiosidad me traicionaba tratando de verlo a simple vista, y luego con los lentes de sol de mi esposa, pero solo alcanzaba a ver destellos que herían mi pupila. Mis ojos se llenaban de lágrimas, pero mis hijos estaban extasiados. Les pedí uno de los lentes desechables que habían comprado en la escuela para este fin y mi respiración se detuvo. Podía ver claramente el borde incandescente de la parte aún descubierta del sol, contrastando con un perfecto circulo negro formado por la luna interpuesta entre mis ojos y el gran astro rey. La circunstancia era una, pero los diferentes lentes me mostraban diferentes situaciones. Existe un mundo espiritual que, al igual que ese eclipse de luna, es invisible a nuestros ojos naturales; pero que con los lentes apropiados (los del Espíritu), nos muestran la maravillosa realidad de Dios… Por eso Pablo nos insta a vivir “no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.” (2 Corintios 4:18). Debemos enfocarnos en las cosas (asuntos) de arriba.

¿Te imaginas poder ver tu vida y lo que te rodea como lo ve Dios? Verte a ti mismo como Él te ve, sintiendo Su profundo e incontenible amor por ti; viendo a tus seres queridos como parte de Su maravilloso propósito; viendo el potencial en cada ser humano y la oportunidad en casa reto. ¡Ver a tus enemigos con los ojos de amor del Jesús que murió por ellos también y que “hace llover sobre buenos y malos”! ¿Cómo viviríamos si de verdad entendiéramos que Él está siempre en control, que ya ha visto nuestro futuro y que tiene grandes planes para los que Le creemos? Jesús dijo que nos prepara moradas eternas en el cielo. Piensa en eso. Él piensa en nosotros, tanto, que intercede día y noche por nosotros ante el Padre (Romanos 8:34b). ¿Cómo te sentirías si pudieras ver Sus legiones de ángeles poderosos acompañándote adonde vayas y guardando tu hogar y tu familia? Pues ésta es la Verdad, es invisible pero real. Debemos buscar lo de arriba meditando en Él, y no distraernos en lo natural y temporal. Dios está en Su trono y cuida de ti, así que:

“Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.” Colosenses 3:2