Todo tu potencial
“Y el ángel de Jehová se le apareció, y le dijo: Jehová está contigo, varón esforzado y valiente.” Jueces 6:12
Cada vez que lentamente descendía de mis subidas al Ávila, la orgullosa montaña que se yergue por todo el norte de mi natal Caracas, mi cuerpo se sentía extenuado, sobre todo las piernas. A la subida de poco más de un kilómetro, pero con unos 45 grados de inclinación a la estación La Julia, le seguía un intenso entrenamiento con pesas y barras. Pero ese día, al bajar y llegar finalmente a mi auto, me percaté que había dejado las llaves arriba. Volví a subir con fuerza inesperada. El pensar que alguien me pudiera robar el auto (sobre todo por un error tan tonto) fue un excelente motivador. Afortunadamente aún estaban donde las había dejado, pero aprendí que somos mucho más fuertes y resistentes de lo que nuestra mente cree. En esta cita, el ángel de Jehová (que es Jesús) se le presenta a Gedeón quien, al igual que todo Israel escondía los alimentos de sus enemigos, los madianitas y los amalecitas. Pero a este joven que se siente impotente porque su familia “es pobre en Manasés” y él es “el menor en la casa de su padre” (verso 15), Jesús le afirma estar con él y además le llama “esforzado y valiente,” ¿por qué?
Dios te creó, por eso conoce mejor que tu mismo lo que puso dentro de ti. El conoce tu potencial del mismo modo que un fabricante de autos conoce la capacidad del vehículo que manufactura. Hay dones en ti que, sin presión, nunca saldrán a luz. Así como yo no creía poder subir dos veces seguidas a esa montaña, la mayor parte de los límites que separan lo que eres ahora de aquello para lo que Dios te creó, están en tu mente. Allí reside la barrera. Por eso debemos darles la bienvenida a las pruebas, porque nos sacan de nuestra zona de confort (que es agradable, pero atrofia) y nos colocan en nuestra zona de crecimiento. Es allí donde nos desarrollamos. En medio de esta epidemia y de tantas cosas pasando simultáneamente en el mundo, es tiempo de recordarnos que somos creación de Dios, que Él puso un propósito y talentos únicos en cada uno de nosotros, y que si no estamos haciendo Su voluntad, los estamos subutilizando. Demás está decir que Gedeón alcanzó victorias extraordinarias, retado y tomado de la mano de Dios. Atrévete a ir por más. Osa soñar por grandes realizaciones. No temas retomar planes que llevan años engavetados porque no lo harás solo, Él estará contigo:
“Jehová le dijo: Ciertamente yo estaré contigo, y derrotarás a los madianitas como a un solo hombre.” Jueces 6:16